José Luis Giordano
Diciembre 31, 2004 (Última revisión: Enero 2, 2005)


Las pantallas o displays del tipo denominado "plasma", son planas, livianas, con una capa o substrato superficial que cubre millones de pequeñas celdas o "burbujas". Cada burbuja contiene neón y xenón gaseoso a baja presión, y está cubierta con una substancia fosfórica. Dentro de cada celda, hay tres subceldas que generarán los respectivos colores primarios, rojo, verde y azul (RGB). Hay que aclarar que la denominación "fosfórica" es genérica, ya que hay compuestos que no contienen fósforo. Más detalles pueden encontrarse en sitios como:
http://electronics.howstuffworks.com/plasma-display3.htm

 

 

 


O sea que, al igual que otros dispositivos ópticos de color, las pantallas de plasma están formadas por pixels RGB, controlados por la electrónica que transmite la imagen. Pero ... ¿cómo se genera la luz o color en cada subpixel de las pantallas de plasma?

 

 

 

 

 

 


El principio físico es similar al de otras pantallas, ya que se trata del fenómeno conocido como luminiscencia. Inicialmente, debido a un campo eléctrico intenso, los átomos de un elemento "se ionizan", conviertiéndose en un plasma. En este gas excitado, electrones libres acelerados colisionan con electrones de capas internas de átomos del gas, exitándolos. Luego, estos átomos se desexcitan emitiendo luz ultravioleta (UV). Posteriormente, como esta radiación invisible tiene energía suficiente, excita el estado electrónico de los átomos de la cobertura fosfórica. Finalmente, la desexcitación de estos átomos, produce la emisión de radiación visible, correspondiente al R, o al G o al B, ya que la composición química de la substancia fosfórica de cada subcelda, es la apropiada para generar color rojo, o verde o azul. Cuando esta emisión es rápida, la luminiscencia recibe el nombre particular de fluorescencia (como en los tubos fluorescentes); contrariamente, si la emisión tarda más en producirse, el fenómeno se conoce como fosforescencia, que es el caso de las algas marinas, los tubos de rayos catódicos (CRT) y las pantallas de plasma.

 

 

 

 

 

 


La señal electrónica (antes principalmente analógica, y ahora digital en la mayoría de los aparatos modernos), hace que millones de burbujas RGB encendiéndose y apagándose con el color apropiado, formen una nítida "imagen viva". Pero lo que más sorprende de estas modernas pantallas, no es solo su actualmente alto precio y calidad de imagen, sino que son planas y delgadas, debido a que no tienen el CRT, que además de pesado, de considerable consumo y generación de calor, hace que las pantallas tradicionales sean curvas y profundas.

Algo más; En las pantallas con CRT, los televisores (TV) color tienen 3 cañones de electrones, para R, para G y para B, dentro del mismo tubo. Pero tanto en los TV-blanco y negro (con un cátodo) como en los TV-color (con 3), los electrones son frenados al chocar con el fósforo de la pantalla, generando rayos X. Esto no sucede con las de plasma, donde no hay desaceleración de electrones.

Finalmente, hay que mencionar que las pantallas de matriz activa formadas por millones de pixels con transistores y condensadores, también son caras, planas, delgadas, livianas, tienen bajo consumo y no generan rayos X ni tanto calor como los CRT. Pero las pantallas color de matriz activa, y las grises de cristal líquido (LCD), funcionan utilizando otros principios físicos, y resultan muy sensibles a las bajas y altas temperaturas (fenómeno al menos observado por nuchos de nosotros al llevar un laptop, calculadora de bolsillo o reloj digital a la playa).

Más detalles de las LCDs y de matriz activa pueden encontrarse en
http://electronics.howstuffworks.com/lcd.htm
http://electronics.howstuffworks.com/lcd8.htm